Conocer al profesional y a la persona es esencial en el trabajo de headhunter
Respeto, calma y empatía son fundamentales para una comunicación fluida en el proceso de evaluación
En la conversación, muestra tu verdadero yo. La autenticidad crea conexiones genuinas sin la presión constante de un ‘examen’
Una de las partes esenciales de nuestro trabajo como headhunter es conocer no solo al profesional, sino también a la persona. Los currículums de los candidatos a una posición directiva se parecen mucho en cuanto a logros se refiere. Lo auténticamente diferencial es cómo lo han hecho, con qué valores afrontan su trabajo y qué tipo de aprendizajes han adquirido a lo largo de su trayecto, no solo profesional sino también (y, a veces, sobre todo) vital.
Por eso, siempre he huido de la entrevista tradicional, ya que considero que ponemos a los candidatos más en una situación de examen que en una donde emocionalmente quieran abrirse. Y es importante que lo hagan, ya que acaba siendo beneficioso para ambas partes. Para la empresa, porque puede evaluar la personalidad del candidato y para el candidato porque le podemos ayudar a ver si sus valores y maneras de entender la vida encontrarán cabida en la empresa que le proponemos.
Así que siempre he creído mucho en la potencia del arte de conversar. Es, sin duda, una habilidad esencial y fundamental en nuestras interacciones sociales, y un proceso de evaluación no deja de ser, también, un acto social: consiste en la capacidad de mantener una comunicación fluida, respetuosa y significativa con otras personas.
A veces hablamos demasiado y escuchamos poco
Prestar atención a lo que la otra persona está diciendo, a cómo lo dice y a por qué lo dice es una muestra de nuestro interés genuino en su punto de vista. Respeto, calma y empatía son fundamentales para que la comunicación fluya.
En el arte de conversar no valen las preguntas cerradas. Hay que intentar poner sobre la mesa temas amplios y abiertos (evidentemente relacionados con el trabajo, que es el contexto donde se mueve la conversación en nuestro “oficio”) y conversar sobre ellos de la manera más profunda y significativa posible, sabiendo que conversar es compartir y requiere también que el headhunter se exprese con autenticidad.
Es relevante evitar juicios de valor, mantenerse en posicionamientos rígidos o significar divergencias. Es muy importante aceptar que cada persona tiene su propia forma de pensar y respetar sus diferencias, ya que solo veremos los auténticos valores y maneras de entender la vida profesional si comprendemos y aceptamos sus opiniones.
Y, sobre todo, si quieres que la situación de “examen” no esté constantemente sobre la mesa, muestra tu verdadero yo en la conversación. No trates de impresionar a los demás o de ser alguien que no eres. La autenticidad crea conexiones más genuinas.
Juanjo Planes
Presidente de Konsac